Mejores personas y mejores equipos
Algunas empresas logran ser muy rápidas para tomar decisiones o para llegar a conclusiones esenciales, otras logran mejor lealtad de sus clientes, otras… en términos llanos hay algunas empresas que desarrollan mejor su capital humano. El desarrollo de capital humano puede deberse a cualquiera de tres situaciones.
La primera es la calidad de la selección y el reclutamiento, el buen ojo para seleccionar los candidatos y los procesos que garanticen que la selección es la ideal. La segunda es una organización bien estructurada, con valores y reglas definidas que aseguran que quien sea que entre a la organización sea la persona adecuada. Y por último hay empresas que saben crear excelentes equipos de trabajo, interdisciplinarios y funcionales, donde los egos y las malas prácticas sean mitigadas por varias personas de talentos distintos pero capacidades similares.
Muchas de las empresas que tienen problemas con el desarrollo de capital humano, sobretodo las más nuevas, batallan en alguna de estas tres áreas (si no es que en las tres). Muchas de las oportunidades en capital humano provienen de que algunos negocios viven en paradigmas o mitos sobre el desarrollo del capital humano. Uno de los mitos más arraigados es que los equipos de trabajo no deben estar constituidos por muchos jugadores claves sino que deben ser escalonados y coordinados por un jugador clave y varios jugadores de menos experiencia/talento.
Cuando analizamos una empresa y vemos la diferencia entre el talento y el resto de la compañía, la diferencia suele ser enorme. Esta diferencia es visible sobretodo en tareas operativas donde el talento desarrolla sus tareas tres o cuatro veces más rápido que el resto de sus iguales. Cuando los puestos son creativos, esta diferencia puede ser de hasta seis o siete veces mayor. Pero, ¿por qué no hacemos equipos de talento para resolver los grandes problemas que aquejan a nuestras empresas?
Los directores más experimentados sabrán lo difícil que es gestionar un equipo conformado por talentos pero cuando se trata de desarrollar un nuevo producto, salir de un bache o resolver un problema que ya tiene tiempo, no existe una mejor solución que este tipo de equipos.
