Leí por ahí un post viral que decía –»Todo mundo sabe que si eres bueno en tu trabajo, tu recompensa será más trabajo mientras que el flojo agusto»– traté de resistirme pero me uní al debate, agregando –»En primer lugar, si eres bueno en tu trabajo ¡conservas tu trabajo!»–
Muchas personas ven el trabajo como una carga inevitable para subsistir, como si no se tuviese una opción aún y cuando por elección se está ahí, nadie puede jamás decidir por nosotros, así que si una persona considera que el trabajo es una carga dolorosa así lo ha decidido. ¿Tienes a alguien en tu equipo que percibes le ocurra algo similar? Una persona con mentalidad de víctima o personaje de Victoria Ruffo puede ser de lo más complejo enfrentar en el camino del liderazgo. Te comparto dos ideas para este caso:
1. Provoca movimiento
Me decía una persona que no le gustaba su oficio pero que estaba esperando encontrar algo que le gustara lo suficiente para cambiar de trabajo. Le dije ¡no lo vas a encontrar así, si algo no te gusta, solo muévete! Lo que nos gusta no llega a nuestra vida por casualidad o destino, lo construimos, le damos forma todos los días. El cambio depende de nosotros, de cada cosa que decidimos hacer y no hacer. Así que a movernos y provocar movimiento a nuestro alrededor, cada vez que escuches a alguien quejarse rétalo a moverse, recuérdales que decía Newton que los objetos en movimiento tienden a permanecer en movimiento mientras los que no, solo se percibirán estancados.
2. Lo difícil no tiene que doler, promueve un lenguaje positivo
¿Cómo podría ser menos doloroso? ¿Qué has hecho para disfrutarlo? Preguntas que puedes aplicar cuando una persona se acerque a ti para platicarte porqué algo es difícil, doloroso o desagradable en el trabajo, primero invítalo a reflexionar sobre lo que le toca.
Le damos mucho valor a lo que nos incomoda, hasta que nos damos cuenta que hemos hecho poco al respecto, porque siempre podemos hacer algo ante las dificultades en el trabajo, de nosotros depende que no duela.
Somos responsables del ambiente, si llueve prendemos el parabrisas, ponemos música y seguimos adelante. Mi propósito es despertar ideas, platícame ¿Qué otras ideas podemos implementar con la mentalidad de víctima en el equipo?.
Eva Saiz