Me llamó la atención la historia de Hikmet Kaya quien comenzó en 1978 a reforestar el área de Sinop en Turquía, después de 25 años y 30 millones de árboles, logró revivir una zona completamente árida en un lugar lleno de vida, un bosque completo. Existen historias increíbles de personas que han logrado lo impensable gracias a un ingrediente «constancia».
El movimiento es la naturaleza que nos motiva a provocar el cambio, pero el movimiento de forma aislada no ocasiona los grandes cambios, aquellos que además de moverse lo hacen con un propósito, un sentido, logrando trascender más allá de un singular cambio.
Grandes cambios, es lo que se necesita en ocasiones para hacer una diferencia notable, una que destaque lo suficiente para mover e impulsar a otros.
Así los líderes son clave, se enfocan con constancia para sumar cada movimiento, uno a otro para dar paso a lo que sigue, porque las organizaciones deben seguir y estamos para provocar que sigan a lo grande.

Despertar ideas es mi propósito.
Eva Saiz